En una emotiva ceremonia realizada al mediodía de este jueves 12 de junio en el teatro Carlos Rubira Infante de la Casa de la Cultura, núcleo de Santa Elena, el reconocido médico Dr. Fernando Granados Cerezo fue homenajeado en el día de su cumpleaños con el lanzamiento de tres obras literarias de su autoría. La ocasión reunió a destacados representantes del ámbito cultural y literario del país, quienes celebraron la trayectoria y el legado de uno de los profesionales de la salud más admirados del Ecuador.
La obra principal presentada, Raíces de un soñador, relata en forma autobiográfica el camino de superación del Dr. Granados Cerezo. Nacido en el cantón Baba, en la provincia de Los Ríos, hijo de padres agricultores de escasos recursos, el texto narra cómo, gracias a su esfuerzo, disciplina y perseverancia, logró cumplir su sueño de convertirse en un médico de prestigio. La historia no solo rinde homenaje a su vida, sino que se convierte en una fuente de inspiración para las nuevas generaciones.
El evento contó con la participación del gestor cultural César Frías, quien destacó la importancia y profundidad del texto autobiográfico, resaltando los valores que transmite. Además, la escritora peninsular Amelía Pinoargote y el poeta Luis Franco presentaron los otros dos libros del autor: dos colecciones de poemas dedicadas a la vida, al amor y la naturaleza, los cuales fueron recibidos con entusiasmo por el público asistente.
Visiblemente emocionado, el Dr. Granados Cerezo agradeció el homenaje y compartió un mensaje lleno de esperanza y motivación para la juventud. En su discurso, instó a los jóvenes a luchar por sus sueños, a no rendirse ante las adversidades y a hacer del estudio un hábito de vida. “Todos los días debemos aprender algo nuevo, porque solo así estaremos preparados para enfrentar los retos que nos presenta el mundo”, expresó.
El homenaje fue un reconocimiento merecido a una vida de entrega, servicio y compromiso tanto en el ámbito médico y ahora en lo literario. Con estas tres obras, el Dr. Granados Cerezo no solo deja huella como profesional de la salud, sino también como un autor que transforma su historia personal en una fuente de inspiración colectiva.
