Una ciudadana de nacionalidad norteamericana denunció a la policía que su novio ecuatoriano había sido secuestrado en la provincia de Santa Elena. El plagiado se movilizaba en un vehículo y presuntamente los malandrines también se llevaron el carro.
Los malandros tomaron contacto con la extranjera a quien le pidieron $ 15.000 a cambio del rescate de su amado, como la mujer les dijo que no tenía esa cantidad le exigieron que les haga la transacción desde EEUU a una cuenta en Ecuador.
Las labores de inteligencia y el seguimiento mediante las cámaras de videovigilancia lograron determinar que el supuesto secuestrado habría fingido el rapto. La policía informó que el carro supuestamente robado salió desde Salinas hacia Guayaquil con el novio de la norteamericana y otras tres personas sin forcejeos ni violencia.
Luego del seguimiento se logró localizar a los sospechosos en la ciudad de Guayaquil y fueron capturados por la policía. Entre las evidencias están los teléfonos móviles de donde hacían las llamadas y los mensajes de texto para amenazar a la foránea.