Los comuneros de Juntas del Pacífico al sur de la provincia de Santa Elena, lugar donde se construye la primera cárcel de máxima seguridad en el país, esperan que todos los ofrecimientos que las autoridades de gobierno les han prometido se cumplan.
“Aquí hacen falta muchas cosas, antes de aceptar la construcción hubo un intenso debate para dar paso a los trabajos, confiamos en la palabra de las autoridades que vivieron a convencernos., ojalá no nos fallen”, comentó uno de los lugareños.
Entre las principales exigencias de estos pobladores están, la edificación de un centro de salud, mejoramiento del sistema de agua potable durante 24 horas, dos pabellones de aula de la unidad educativa existente, entre otras peticiones.
Por la cantidad de personas que serán contratadas para los trabajos de edificación del nuevo reclusorio los lugareños confían que se va a reactivar la economía, pero siente temor en que a futuro la zona se convierta en peligrosa.
“Nos han dicho que con la cárcel vendrán más policías y militares para vigilar la comuna por eso estamos tranquilo”, expresó otro habitante.